Unos
cuantos meses después por fin doy por cerrado el bloque de entradas sobre el viaje
que hicimos a Roma en febrero con una reseña a la Brasserie 4:20, sin duda uno de los mejores locales de la ciudad
junto con el Ma Che Siete y el Open Baladin.
Pero
antes quería hablaros del Smoke Ring,
situado justo al lado de Brasserie 4:20
y que descubrimos por auténtica casualidad al tener que esperar a que abriera
éste otro.
El
local parecía uno de esos sitios americanos de comida barbacoa, con
mucha madera y ladrillo en las paredes y la bóveda del techo, con una pequeñísima
barra al fondo y unas cuantas mesas grandes tipo picnic para sentarse. En cuanto a la cerveza
disponían de seis grifos, uno con la esquiva Schlenkerla Urbock y los cinco restantes todos ellos de la micro
italiana Revelation Cat, lo cual nos
hizo sospechar (y posteriormente lo confirmamos) que este local era propiedad de Alex
Liberati, cervecero de la citada microcervecera y también de la Brasserie 4:20.
Nos
pedimos una Revelation Cat 100 Days on the hops, una “czech IPA”
(eso decía) con 5,8% de alcohol, cítrica, afrutada y leñosa pero sin ese carácter
esperado del Saaz, que cumplió justita; y por otro lado la R.C. Hopaddendum, otra
IPA pero en este caso con muchos recuerdos a fruta tropical y también cítricos,
con un amargor marcado y aparentemente más ligera pese a tener 6% y que nos
gustó más. Para cerrar la visita elegimos una double IPA (4 de los 6 grifos
eran IPA o double IPA) en este caso llamada Mauricius
Maleficium bastante contundente, maltosa y corpulenta que aunque gustó nos terminó cansando un poco.
Además
de los seis grifos de cerveza, como podéis ver en la foto de la derecha, tenían otros tantos con ron, ginebra, vodka… con
los que preparaban cócteles tentadores como el elaborado con un tal Hoppy Bourbon
que tenían en barrica, pero los tuvimos que obviar dada la jornada intensa que
nos esperaba posteriormente. También tenían una oferta amplia de comida
tipo barbacoa como costillas y hamburguesas de ternera.
El
único punto que no nos gustó del local a parte del precio excesivo (5 a 6 euros
por 40 cl - o menos - de cerveza de barril elaborada por ellos mismos…) fueron los vasos horribles (en la foto anterior se pueden ver), literalmente unos botes de conservas de vidrio con
los bordes para las tapaderas y todo. Curiosos, quizás, e incluso algo
graciosos, pero también bastante incómodos por no llamarlos horteras, para qué
engañarnos…
Tras
salir del Smoke Ring entramos en su
vecino Brasserie 4:20, el auténtico
protagonista de la jornada.
Lo
cierto es que sus mayores atractivos no son ni el horario de apertura (19.00h)
ni mucho menos su situación, en el flanco oeste del río Tíber y al sur del bohemio
Trastevere pero con unos alrededores de barrio periférico bastante tétricos e inseguros a cierta hora de la noche. Pero sin duda una
visita cervecera a Roma debe incluir este local, y a continuación entenderéis
el porqué.
El
bar tenía una estética moderna, con muchas tuberías descubiertas y colores
fríos en algunas paredes y las luces, todo ello contrarrestado por la calidez del ladrillo de la bóveda, el lúpulo seco que colgaba del techo y las
innumerables pizarras coloridas.
No conseguí hacer una sola foto decente de la barra así que os dejo esta de su propio perfil de Google+. |
Zona de mesas justo enfrente de la barra. |
Como
tantas otras veces, preferimos sentarnos en la larga barra, suficientemente ancha y con cómodos taburetes para cenar cómodamente y también
poder charlar con el barman, quien siempre tiene algo que ofrecer.
Pizarra con los barriles. |
Neveritas repletas de joyas. |
Tras
analizar detenidamente la pizarra con los 20 barriles (la mitad de ellos, como
era de esperar, de Revelation Cat,
pero también Schlenkerla, Boon, Mikkeller… e incluso una Gose auténtica de Leipzig) nos decantamos
por seguir explorando lo que ofrecía Revelation
Cat, esta vez con su Bombay Cat,
una black IPA con una combinación bastante conseguida de notas torrefactas,
cacao y lúpulos con recuerdos a fruta tropical y cítricos. Por otro lado, y
como no podía ser de otro modo, pedimos la Gose
de Bayerischer Bahnhof, menos ácida
de lo esperado, cítrica y con bastante presencia del cereal, así como un punto
salado y a manzana verde. Cómo me gustan estos estilos clásicos y/o sus
revisiones actuales…
Bombay Cat y Gose (ésta última con el mismo vaso horrible tipo bote de conserva). |
Sonando de fondo Sultans of Swing de Dire Straits (muy buena selección
musical en todo momento, por cierto) nos animamos con la BlaBla Blend también de R.
Cat, una lámbica con mucha presencia de notas a limón, ligeramente
astringente y con recuerdos a madera no muy estridentes que nos pareció
simplemente correcta. Para seguir con el lado ácido de la vida nos pedimos R. Cat Unicron (en la pizarra aparecía mal
escrito), una sour ale por lo visto muy limitada hecha con la mezcla de una
Russian Imperial stout con una Belgian Sour Stout y envejeciendo el conjunto 18
meses en barrica de Jerez, con 10% de alcohol. Sencillamente brutal, con la
madera y las notas torrefactas como claras protagonistas, aunque dando la
sensación de tratarse más de un Bourbon por los recuerdos a turba, caramelo y
cacao y algo de vainilla. De verdad, una cerveza realmente peculiar, con un
conjunto de matices muy rico y muy bien ensamblados. Sensacional.
BlaBla Blend y Unicron. |
A
estas alturas las entrañas empezaban a pedir algo de sustento para amortiguar todo
lo bebido así que pedimos, dejándonos recomendar, una Hopburger de ternera Chianina con lúpulo en flor entre sus
ingredientes (realmente muy buena, jugosa y sabrosa) y un sándwich de pollo y
verduras, además de unas patatas fritas con varias salsas.
Si las fotos permitieran oler y saborear... |
Inspirados
entonces con I’ve just
seen a face del cuarteto de Liverpool nos pedimos la Revelation Cat Death Star en botella, una I.stout curiosa, algo más dulzona y cremosa de lo habitual para el estilo, y con muchos recuerdos a cacao y vainilla. Muy rica.
Etiquetaza para una buena cerveza. |
La
noche avanzaba, cada vez a un ritmo más lento y con las caras también más
sonrojadas. Desfilaban por los altavoces Scorpions, más Beatles, Queen… hasta
que de repente llegó Stairway to heaven de Led Zeppelin y un arrebato de energía
me llevó a pedir la última cerveza de la noche, cuyo nombre tan inspirador, R. Cat Nemesi, sabía que no me iba a
decepcionar. Se trataba de una sour ale con 12% de alcohol con marcado
protagonismo de frutos rojos tipo grosellas y arándanos, astringente,
ligeramente dulce y también un punto ácido pero bien equilibrado, vinosa, como
si se tratara de una red flanders pero con bastante más cuerpo.
Copón sensacional para rematar la velada. |
Y en auténtico éxtasis nos despedimos de este buen local del que destacaría sin duda el ambientazo que había por la noche, la música y la comida así como la amplia selección de cervezas en
barril y también en botella, entre ellas algunas joyas vintage (bastante caras, eso sí).
Respecto a lo más flojo, además de lo citado anteriormente del incómodo horario
de apertura y su situación geográfica, tengo que mencionar sus precios algo caros
y un personal algo distraído, poco rodado y sin saber muy bien lo que vendía
(hasta que llegaron más tarde los “refuerzos”…). Sobre los precios, dejando a
un lado la comida y las cervezas en botella (si quieres algo especial, algo
tiene que costar…) especialmente destacable por lo negativo me pareció que las Revelation Cat, siendo cervezas elaboradas por
los mismos propietarios, costaran los 35cl a
5,50€-6,30€. Pero aún con todo eso, y como decía, sin duda la Brasserie 4:20 debería ser un must en cualquier visita cervecera a
Roma que se precie.
-----
Y
con esta entrada doy por cerrado el bloque sobre el viaje a Roma de febrero.
Muchas cosas se han quedado en el tintero pero creo que con todo lo que ha
desfilado en estas cuatro partes os podréis hacer una idea bastante aproximada de
la interesantísima y viva realidad cervecera que bulle a día de hoy en la città eterna. A quienes no conozcáis
Roma desde luego os insto a que la visitéis lo antes que podáis porque seguro
que querréis volver. A quienes ya lo hayáis hecho no creo que haga falta daros
razones para ello. Sin duda en lo personal Roma me ha enamorado mucho más de lo
que lo ha conseguido hasta el momento cualquier otra gran capital europea.
El puñetero bote de conserva es una moda yankee ( y hipster), les llaman mason jars y los usan para cualquier liquido bebible. El origen es del entorno rural yankee, que a falta de vasos, por necesidad, usaban botes de conservas para beber sus "Moonshines" (destilados locales) He de decir que por muy guay que quede para cerveza es quizas el vaso mas inapropiado que puedas poner, plastico a parte.
ResponderEliminarMuy buenas Fernando! Pues menuda moda... como dicen más abajo, cuando crees que ya todo está inventado llega otra barbaridad que supera lo anterior... En fin, muchas gracias por tu aporte! Desde luego inapropiado creo que se queda corto para definir este ¿vaso? Saludos!!
EliminarBuah, vaya pasada de cervezas... me encantaría probar la Gose y la Bock de Schlenkerla, única que me queda por degustar de esta fábrica. También, como tú bien dices, vaya pasada de precios. Me parece salvaje.
ResponderEliminarEsta serie de post sobre Italia están siendo muy ilustrativos, y además son amenos de leer. Gran trabajo, Pau. Un abrazo
Hola Hugo! Pues sí, una pasada poder probar esa Gose, de esas pequeñas joyas que uno no tiene la suerte de ver todos los días. La Schlenkerla preferí obviarla (en mi caso la única que no he probado es la Fastenbier de barril). Los precios tu lo dices, una salvajada, aunque lejos de ser algo de esto local fue la tónica en muchos locales de la ciudad.
EliminarGracias por tus palabras y espero que te sea útil si te animas a viajar allí. Un abrazo!
Aaaaaamigo, te vas a Italia, modernos como son ellos y te esperas un vaso tradicional??? nooooo, cosa nueva que llega, cosa nueva que pillan, el mundo hipster nos invade!!!! jjajajajaja
ResponderEliminarAquí en Madrid se empiezan a ver para mojitos y cosas de esas, sobre todo en barrios como Malasaña, solo espero que las cervecerías de referencia en la capital (también por esta zona), no caigan en esto...
Lo del tema de los precios de la cerveza en brewpubs ya lo comenté una vez en el blog, no me parece lógico que si vendes tu propia cerveza, sea tanto o más cara que otras que vienen de bastante más lejos...
Buen viaje te pegaste, yo desde que me leí 50 veces tus artículos sobre Bélgica antes del viaje lo tengo claro, cada vez que vaya a coger un avión me paso antes por aquí, no sea que hayas estado tú antes y así pillo referencias cerveceras jajaja ;-p
Un saludo!!
Jajajajaja!!! Tu lo has dicho... la moda hipster nos ha invadido... arghhh!!! Dudo que en ciertos locales de Madrid tengan éxito estos vasos, aunque ya te digo que se me ocurre uno en concreto que no creo que tarde en incorporarlos si no lo ha hecho ya...
EliminarEl tema de los precios, pues sí, un completo sinsentido... Es cierto que no es lo mismo una Barleywine o una Sour envejecida en barricas que una pale ale, pero aún así los márgenes que deben tener deben ser como para hacérselo mirar...
Jajajajaja!!! Ya decía yo que la serie de Bélgica estaba aumentando sus visitas sorprendentemente jajajajaja!! Nada, me alegro que te fuera útil, al final eso es lo que más me reconforta, pensar que alguien pueda aprovecharlo.
Un saludo Adrían!!!
Justo he llegado esta mañana de Roma y tengo pendiente un post sobre la brasserie 4:20 ;)
ResponderEliminarPD: Este sábado la Bla Bla blend era una mezcla de Boon Geuze, Summer Lambic y Cantillon.
Jejeje! Sí, vi una foto tuya con la pizarra de Brasserie 4:20 y pensé que menuda casualidad ;).
EliminarLo de la BlaBla Blend desconocía que era una mezcla de cervezas literal, de hecho pensaba que era una elaboración de Revelation Cat. La que tomamos nosotros tampoco me entusiasmó, la verdad... aunque si varían las mezclas según la semana, con esa Cantillon de por medio igual mejora la cosa... ;)
Saludos!!!
Otros lugares que quedaron pendientes el año pasado y que a la próxima caen seguro... Menudo viaje, pájaros!!!! y menudos birrotes... lo del tarro de la mermelada... de juzgado de guardia!
ResponderEliminarEl tarro de mermelada supera con mucho a tus queridos vasos de tubo, a los vasos de plástico y a toda ese submundo de los vasos horripilantes...Jejejeje!!!
EliminarDel viaje, pues eso es lo que tiene Roma, que antes o después vuelves y puedes disfrutar de los locales alucinantes que te perdiste! Salut mestre!
Ya tenía yo ganas de leer la crónica de la Brasserie 4:20, he estado en Roma pero no la conzco, asique ya tengo excusa para volver y según tu crónica se me han puesto los dientes muy largos.
ResponderEliminarEn cuanto a los vasos estoy contigo son horribles, donde esté un vaso de pinta americana...
Saludos Pau!
Pues sí, el local merece mucho la pena, imprescindible en cualquier visita a Roma. Pensándolo un poco creo que de elegir el mejor posiblemente sería Ma Che Siete y luego Open Baladin, por situación y por las cervezas (mayor variedad o calidad general).
EliminarLos vasos... sin palabras, jejejeje!!!
Saludos Gonzalo!!!
¡Bueno bueno bueno Pau, esto ya es con alevosía! jajaja
ResponderEliminar¡Menuda pinta tienen esos manjares y esas espumosas!
Sólo con ver esa hamburguesa, dan ganas de darle un mordisco a la pantalla jaja
Se ve que lo pasaste de lujo y eso es lo que cuenta.
Anoto las recomendaciones cerveceras para dar cuenta de ellas, muchas gracias por la info.
¡Saludos y salud!
Jajajaja!! ¿Alevosía?? Tampoco es para tanto, hombre!! Jajaja! Pues la hamburguesa estaba bien rica, tras la de Open Baladin (que es otro nivel) fue la que más nos gustó.
EliminarA ver si es verdad y te resulta útil para algún futuro viaje!! Saludos y gracias por tus palabras Benji!!
Vaya moda lo de los vasos, es para pedir que pongan otro. Al menos si lo de dentro es bueno se puede dejar pasar.
ResponderEliminarVaya viaje os distéis, repleto de homenajes y lugares con buenisima pinta.Si vuelvo tomaré nota de esta serie de posts.
Saludos!
Ya sabes, Cristóbal, en esto de las modas o estás dentro o desde fuera es poco menos que hortera... Gracias por tus palabras y espero que te sea útil en un futuro (y si descubres cualquier cosa también espero noticias al respecto, jejeje!). Saludos Cristóbal!!
Eliminar...y se hacía esperar y al final ha sido el remate a un viaje, mejor dicho, a unas crónicas a cada cual mejor. Alucinante los grifos de Revelation Cat, me encanta todo lo que hacen.
ResponderEliminarMuy curioso, incluso hortera, me lo has quitado, lo de los botes de conserva con su rosca y todo. Creía haberlo visto todo en cuanto a cristalería para cerveza pero aún puede haber más...
Un abrazo y enhorabuena por el pedazo de viaje que os marcásteis
Me alegro que te haya gustado la serie, Jose! Lo del "bote-vaso", pues sí, siempre hay alguien que le da una vuelta de rosca a conceptos sin ningún sentido y que terminan poniéndose de moda...
EliminarUn abrazo y gracias Josete!!
BEBER DE UN VASO DE CONSERVA PFFF, PARA ELLO ME LLEVO EL CLÁSICO DE NOCILLA Y APAÑAO JAJAJAJ.
ResponderEliminarCOMO TEDDY, ME MOLA REVELATION ( EN SU JUSTA MEDIDA OJITO PERDIZ ) PERO ESA BOMBAY CAT ME SACUDIÓ EL VERANO PASADO Y LA DEATH STAR ESTABA RICA DE COJONES OIGA.
LA JAMVURGUESA PFFFF........MMMM.............GRRRRR...........¡¡¡¡¡¡ÑAAAAAAAMMMMMM QUE LE DABA YO A ESA PERRACAAAAAAAA!!! XDDDD DIOS, QUE ACABO DE CENAR Y YA TENGO JANGRI JAJAJAJAJA.
YO DE MAYOR QUIERO SER TU CABRONCETE, QUE VIAJES TE PEGAS, QUE PUTA ENVIDIA.
BESOS FOR EVERYBODIL! XDD
Jejejeje!!! Pues sí, cualquier vaso de "nocilla" hubiera sido mejor opción que el "vaso-tarro"... jejeje! La hamburguesa estuvo genial, la disfruté mucho, igual que esas Revelation que mencionas, jejejeje!!!
EliminarY bueno, yo también quisiera la peazo colección de etis que tu tienes... y esa barbacoa... jajajaja! Por pedir... XDD
Un abrazo crack!!
POR CIERTO, DESDEÑAS TU MUY FACILMENTE LA SCHLENKERLA NOOOO?? KETAPASAO? RENEGAO! XDD
ResponderEliminarJajajaja!!! Noooo... para nada! Amo Schlenkerla, solo que ya le dimos bastante cuando estuvimos por Bamberg... ahora había que sacarle jugo a la birra italiana!! Jejejejeje!!
EliminarA un viaje como ese me apunto pero de cabeza. Nosotros vamos en julio tres días, no sé yo si me va a dar para tanta birra. Saludos y feliz año!
ResponderEliminarMuy buenas Javier!! Todo es cuestión de organización... verlo todo es imposible pero nosotros también fuimos un fin de semana largo y vimos todo lo que has podido leer en las diferentes entradas... Si necesitas cualquier cosa no tienes más que escribirme por correo. Un saludo y feliz año!!
Eliminar