Aunque
hemos dejado atrás la navidad, y más recientemente esa famosa ciclogénesis
explosiva, estamos sumidos en plena época de frío y para combatirlo hoy os queremos
proponer algo distinto.
Quizás
conozcáis el vino caliente y especiado, Glühwein
en alemán. Para los que no, se trata de una deliciosa y reconfortante bebida
muy especiada (aún con las lógicas variaciones de receta, no suele fallar el
anís estrellado, la canela y la naranja). La gente de los países del norte y
centro de Europa lo suelen consumir sobretodo allá por el mes de diciembre, coincidiendo
con la época de adviento, en sus casas a la luz de la lumbre o paseando por los
típicos mercadillos navideños.
Arriba, el citado vino caliente con sus ingredientes
(foto tomada de aquí)
Pero
cómo esto es un blog de cervezas, aunque ya sabéis que el vino me apasiona
también, os quiero hablar de una cerveza un tanto distinta que conseguí hace meses gracias
al buen amigo Sven (Drunk Monk) y que podría compartir mesa con el citado vino sin amedrentarse un ápice. Se trata de la alemana Aktien Heisses Böckle una elaboración que posee un carácter
especiado muy marcado ya que contiene entre sus ingredientes jengibre, canela y
coriandro.
Arriba, la cerveza acompañada de un “pa
beneït”, un dulce típico de mi Safor natal (desconozco si también en otras partes...).
Los
ingredientes citados tampoco son ninguna novedad en una cerveza ya que en no
pocas cervezas belgas, inglesas o estadounidenses, por ejemplo, los utilizan. Dónde
realmente viene la gracia, al menos en mi opinión, es porque la cerveza se
consume caliente, concretamente se recomienda calentarla por encima de los
50ºC. Se toma la botella y quitándole la chapa para evitar explosiones, se la
mete en una olla con agua caliente haciendo una especie de baño maría. Luego se
sirve en una copa consiguiendo el resultado que podéis ver más abajo.
Así que ya sabéis, si os cruzáis con ésta botella y queréis darle otra
oportunidad al delicioso mundo de las especias, estoy seguro de que ésta joya
bávara de 6,7% de alcohol no dejará a nadie indiferente… para bien.
¡Que
vivan las cervezas de temporada!
Vamos, que casi acierto al decir que ibas a comentar una Gluhkriek como esta de Liefmans.
ResponderEliminarLa Liefmans estaba deliciosa (tanto, que me he comprado otra y la beberé en breve, pero si veo esta Aktien la cogeré también).
En lo que diferimos es en el proceso de calentado. Después de leer bastante en internet, y que cada uno recomendase un método diferente... me decidí por seguir mi experiencia y calentarla como el gluhwein: directamente al fuego. Se extendía un olor delicioso, pero para la próxima probaré al baño maría.
Pues sí, cómo ya te dije en Facebook, al comentar lo de la Liefmans el balón pasó rozando el larguero... ;). A ver si le echo mano a esa botella, ya que varias cervezas de esa casa me han parecido una auténtica gozada y ésta no creo que sea menos.
EliminarCómo te decía por FB, el tema del calentado yo lo hice añadiendo la botella en agua que había hervido previamente, luego quité la olla del fuego y puse dentro la botella deschapada, hasta alcanzar los 50ºC (eso a ojo...jejeje!), sobre un par de minutos. Creo que es mejor así que ponerla directamente a fuego directo, por el tema de romperse el vidrio, aunque en la etiqueta ya advertía que había riesgo de explosión y que se tenía que ir con cuidado ;).
Ostras Pau, no tenía ni idea de la existencia de este tipo de cervezas. Me parece muy curiosa y cuanto menos habrá que probarla si se tiene la ocasión aunque a mi el Glühwein que probé en su día no me hizo ninguna gracia...demasiado dulce y espaciado. No me molestó tanto la temperatura (gracias a los -7º que teníamos de ambiente)....lo dicho, habrá que probarla si se puede.
ResponderEliminarProst!!!
Bueno, siempre se aprende algo nueva. Yo hasta hace muy poco sólo conocía la existencia del vino pero nada de cervezas así. Hay que probarla, y más siendo un germanófilo como tú ;)
EliminarProst!
Estoooooo....quería decir espaciado..sorry, morcilla finges :P
ResponderEliminarProst!!!!
...manda cojones....lo he vuelto a hacer...lo siento
ResponderEliminarProst!!!!!
Jajajajaja!!! Es que estabas muy "espaciado" esta tarde... ;)
EliminarSimilar al vino caliente del Este de Europa, supongo. El otro día daban a probar en una tienda de té de Pamplona, y me encantó. Sería genial hacerme con una de estas botellas, aunque no parece fácil.
ResponderEliminarSaludos
Sí, creo que va por los mismos derroteros. ¡Qué suerte lo de Pamplona! ¡Estais que no parais por allá arriba! Y en cuanto a lo de conseguir la botella, pues esperemos que empiecen a encontrarse más fácilmente, que no solo de belgas navideñas o de winter ales vive el hombre en invierno :)
EliminarSaludos!
Pero no es algo tan difícil de hacer en casa tampoco. Busquen una cerveza oscura fuertona. Salvator, por ejemplo, que es bien dulce ¡y ni hablar de Aventinus! Agreguen algo de azúcar de caña (o miel si les gusta), cáscara de naranja, clavo, canela en rama y una estrella de anís. Cocinen a temperatura de 70ºC y listo.
ResponderEliminarY se puede hacer lo mismo con un vino tinto medio tobara...
Tomo nota, la verdad es que suena apetecible y es muy sencillo de hacer. Más que con Aventinus (se me hace muy cuesta arriba una weizen caliente...), me pega más con esa Salvator que comentas, jeje!
Eliminar¡Muchas gracias por la recomendación!
Muy interesante..., no tenía ni idea de semajante cerveza..., vamos! que ni se me hubiera pasado por la cabeza tomarme una cervezaa a más de 50º
ResponderEliminarSaludos.
Creo que somos unos cuantos los que desconocíamos tal curiosidad. Yo cerveza a temperatura ambiente, aún, y de hecho lo hago muy frecuentemente en invierno con cervezas "de copón", pero nada de 50ºC... :)
EliminarSaludos José!
Ufff eso va a ser duro para mí... No me veo aún probando eso... pero si hay que hacerlo se hace.... ja ja ja... Si calentamos una Cruzcampo... qué pasará???? JA JA JA
ResponderEliminarJajaja!! Es más que posible que si pruebas a calentarla salga despedida de dentro de la olla... pura física... ;)
EliminarPrueba de calentarla sin quitarle la chapa, Txema... puede que gane, jaja :-)
EliminarJajaja!! Txema, si te animas con esa especie de "ciclogénesis explosiva" del amic Birraire y, lo más importante, si sobrevives, ya nos contarás si gana... xD
Eliminar¡Genial entrada Pau! Tenía ganas de leerla tranquilamente, porque ya había visto tus teasings por Facebook :-).
ResponderEliminarDesconocía totalmente esta cerveza, y tiene que ser curiosísima. Voy a ver si puedo hacerme con ella algún día... Este año tengo hasta marzo; sino ya para el que viene.
Aunque a decir verdad, si alguna cosa me ha gustado especialmente del post es el pa beneït. ¡¡Que buena pinta!!
Salut company!
¡Bones Joan!
EliminarPrimero que nada, no tengo ni idea de lo que es un "teasing", así que... jajaja! ¿Ves cómo estoy muy verde en estos temas de las redes sociales? Jajaja!
En cuanto a la cerveza, pues es muy curiosa, sí. Espero que te puedas hacer con ella, es más, no creo que te sea muy complicado ya que por Catalunya se dejan ver bastantes Aktien.
El pa beneït es un dulce muy sencillo pero a la vez está muy rico. Existen muchas variedades, pero una en concreto, de pasas y nueces, me pierde! ¡A ver si alguna vez puedes echarle el guante y me cuentas!
Salut company!
Vas pez en redes sociales... ¡pero me sorprende ver que también en inglés! Me refería a que provocabas con un comentario previo al post ;-).
Eliminar"Inglish"? Eso' que' e'?? ;)
EliminarLa verdad es que lo había oído, y a pesar de haber tomado el vino caliente con especias en más de una ocasión por mi periplo turístico invernal por Europa, jamás me lo había planteado con una cerveza. Me cuesta la idea de tomar la cerveza a temperatura de sopa, pero quizás una cerveza dulce, alcohólica y especiada... es posible que algún día dé el paso. Nunca digas: "de esta birra no beberé" ;) Salu2!
ResponderEliminarJejeje! Lo cierto es que si has probado el vino caliente especiado en más de una ocasión no te deberías cortar con la cerveza. Si lo pienso, yo tampoco me vería tomando el Gluhwein y sin embargo está muy rico :).
EliminarSaludos!