Tras un viernes pletórico en todos los sentidos llegó la hora de levantarse el
sábado… Cómo bien habréis intuido, con unas ganas de beber cerveza más bien
nulas. Pero ya se sabe que no hay mejor remedio para la resaca que seguir
bebiendo (si lee esto alguien de Alcohólicos Anónimos me declaran persona non grata de por vida…) así que aún con
bastantes dudas, a ello nos dispusimos.
Si
hacéis un poco de memoria, se nos había quedado pendiente La Tape por cuestiones técnicas. Así que llegó la hora de disfrutar
del que a raíz de dicha visita se ha convertido en nuestra opinión en una de
las dos referencias cervecero-gastronómicas de Madrid junto con el Animal.
El
local, con una agradable iluminación natural proveniente de sus grandes
cristaleras, es de esos sitios que transmiten buen rollo y no sabes bien el porqué.
De estética moderna, pintado en tonos blancos y verdes muy suaves, algo de
madera, ladrillo… muy agradable y que incitaba a sentarse pero no a marchar. Con
un poco de suerte pudimos pillar mesa (el local estaba abarrotado) y tras pedir
de comer nos decidimos por acompañar la manduca con la opción del Tasting de 4 cervezas de 20cl, todas de
barril, por 10€. Una buena opción para probar los barriles a buen precio. En cuanto a referencias en botella, aún habiendo cosas muy interesantes, mejor centrarse en las delicias de barril.
Los barriles disponibles aquel fin de semana.
Con
el cuerpo aún un poco quejoso llegó el primer plato: una burrata di Andria (un
queso de vaca fresco similar a una mozzarella por fuera pero cremoso por
dentro, realmente delicioso) acompañado con una Loverbeer Madamin. La cerveza, una sour ale de precioso color
rojizo que ya os adelanto que se va para las mejores cervezas del mes, acompañada
del queso, nos devolvieron a la vida en un solo bocado. El festín siguió con un
humus bastante conseguido y una dupla “estupenda” para cuando el estómago está
en horas bajas: unos callos (había que probarlos…) y unas croquetas de boletus
(muy buenas), todo acompañado por un seguro de vida cómo es Nøgne, y más concretamente, su rica Imperial Brown Ale.
Arriba la burrata con la Loverbeer. Abajo las croquetas
y los callos con la Nøgne.
Con
los callos aún en la mesa nos llegó la tercera cerveza, una Domus Aurea, la cual tengo que reconocer
que la vimos muy venida a menos respecto a anteriores veces. Quizás fuera por
estar tirada en hand-pump (no me
convenció demasiado este mecanismo para esta cerveza) pero la vimos mucho más
plana en comparación con la bestia de lúpulo que era antaño. Tras esta, cerramos la
velada (os recuerdo, en horas bajas…) con una imperial stout, la Left Hand Wake Up Dead, riquísima, muy fácil
de tomar para el estilo, y que acompañó maravillosamente bien a una tarta
casera de melocotón (la repostería de este local es la estrella). Una auténtica
comilona que desde aquí recomendaría a todo aquel que se acerque por Madrid y
preste atención al buen manducar además de a levantar el codo con buena birra.
No será el mejor maridaje, pero no hay duda que cada
cual por su lado estaba alucinante.
Y
como quien no quiere la cosa, y cómo si el ayer no existiera, tras una
reparadora siestecilla nos fuimos hacia el Labirratorium,
dónde nos esperaba Juan (JAB en el mundillo blogger), otra de las personas con las que habíamos intercambiado
algo más que impresiones por la red y que teníamos muchísimas ganas de conocer.
Entre
cervecitas, buena conversación, un poco de queso (alucinante el queso de cabra
cuyo nombre no recuerdo acompañado con mermelada Yria), y todo ello frente a un pequeño calentador (no lo había
dicho aún pero el frío de esos dos días por Madrid fue de armas tomar, y no
sólo para dos valencianos acostumbrados a termómetros altos…). Un muy buen rato
hablando de todo un poco con los tres artífices de este proyecto que aún siendo muy joven apunta muy, muy alto… Sus estanterías rebosan calidad, un número de
referencias que para haber empezado hace muy poco no tiene nada que envidiar a otras
tiendas con más recorrido. Todas y cada una de las cervezas pensadas y elegidas
a consciencia: clásicos belgas y alemanes, un nutrido surtido de británicas,
nórdicas y bastantes estadounidenses, así como unas tentadoras baldas con unas
Baladin recién llegadas (algunas de las cuales con paso por tentadora barrica),
entre otras, eran las referencias. Chicos, ya sabéis lo que dicen los
italianos: “piano, piano se va lontano”… Mi más sincera enhorabuena por el ilusionante
proyecto.
Arriba, los 3 artífices: David, Álvaro y Juan.
Abajo, un rincón alucinante
Pero
se hizo la hora de empezar a calentar barras y a ello nos dispusimos JAB y los
dos Lúpulos con un objetivo: la zona Bilbao, y cómo primera parada el viejo Oldenburg (del nuevo ya os
hablé en el anterior post). Este local era muy pequeñito, rebosante de
breweriana, luces y placas de anuncio, centenares de botellas… ofreciendo un
ambiente muy acogedor (quizás en hora punta y/o con temperaturas más calidas
puede llegar a ser una olla a presión). Las cervezas elegidas, un triplete de
la belga Boon en botella: Kriek
(2010), Oude Gueuze a l’ancienne
(2007-2008) y Mariage Parfait, siendo
la primera y la última las que más gozo nos dieron.
Arriba, los interiores, sin un centímetro
libre de breweriana. Abajo, el atractivo triplete espontáneo.
Con
el ritmo mucho más pausado que el día anterior y con el buen Juan ejerciendo
magníficamente de anfitrión por la Beer
Mile, nos fuimos para L’Europe,
otro de los clásicos locales para cervecear por Madrid. El interior del local,
cómo sacado de un cuento, directamente nos teletransportó a algún lugar entre
Alsacia y Baviera, con una decoración clásica pero muy cuidada, y también igual
que el anterior local, rebosante de calidez. Muy buen ambiente. En cuanto a
cervezas, una carta clásica y poco atrevida en comparación con otros locales
más nuevos, pero aún así merece la pena.
Los cuidados interiores.
Allí
nos juntamos con el homolúpulo David y el gran José (Teddybeer), ésta vez acompañado
por Eva, su mujer (que no se diga que la birra es sólo cosa de hombres…). Tras
los saludos nos pusimos con una St.
Peter’s Bitter y una Brooklyn Lager
por nuestra parte, mientras que los demás eligieron otra St.
Peter’s, y de barril una Tongerlo
Bruin y una Charles Quint Ambrée,
además de una cerveza de frutas cuyo nombre no recuerdo. Buenas opciones para "empezar" a calentar motores. Tras ellas vino hora de asegurar: 4
de las 6 cervezas fueron Orval (un
seguro de vida que enamora más a cada sorbo, en ello coincidimos unos
cuantos…), además de una Urthel
Saisonnere y otra cerveza de frutas. Y para amortiguar el líquido, una
ronda de salchichas y unos bocaditos bávaros (algo así cómo trocitos de pechuga de pollo
empanados).
¡¡A la batalla!!
Se
hacía tarde y faltaba una de las referencias imprescindibles de la escena
cervecera madrileña, el Animal Picar
& Beer, para lo cual desgraciadamente tuvimos que despedir al camarada
Juan, agradeciendo su efímera pero muy agradable compañía. Tras poco más de dos minutos a pie (literal), entramos en este
local que vio la luz el pasado septiembre, pero a pesar de ello, y cómo decía,
se ha ganado el título de visita obligada en cualquier escapada cervecera por
Madrid.
A
la cabeza, Tibor Domenech, un catalán con muy buen gusto musical (mal que le
pese al homolúpulo David), y con una
propuesta a mi entender encomiable: juntar la buena cerveza y el vino con
comida de calidad. Lo mejor, a parte de la comida, una buena carta de cervezas
en botella y barril. Lo menos bueno, que los precios eran un poco elevados, aunque según nos contó Tibor, durante esa semana les había dado un buen recorte.
Cuidadito con la comida…
En
este sentido, y a pesar de haber rebasado la media noche, nos dimos una re-cena
cómo quien no quiere la cosa (no me iba a marchar de Madrid sin comer en
Animal!!). Así llegaron una sobrasada con un pan de otro planeta, unos
chipirones de toma pan y moja… regado todo ello por unas rondas de barril (un
par de alucinantes Kernel Export India
Porter, además de Dougall’s Invierno,
Yria Brown Ale, Mikkeller Saphir Wet Hop, Mikkeller Fair Bar…).
Arriba, una de las neveras más tentadoras.
Abajo, la deliciosa Kernel Export India
Porter de barril.
Pero
antes siquiera de pensar en elegir botellas, Tibor nos sedujo con una tentadora
carrillera de ternera que no olvidaré en muchísimo tiempo (los pocos que no la
probaron, con mucho esfuerzo, lo prometo, la comieron con unos ojos que se
salían de sus órbitas).
Este plato bien merece repetir unas cuantas veces la visita al Animal, ¿eh, mr. Homo Lúpulo de manos cruzadas?
Y
con el estómago lleno, llegó la hora de las botellas (en plural, sí, un plural bastante dilatado...). Y bendita
hora… Tras una primera joya estadounidense, The
Bruery White Oak (una barley wine
hecha a partes iguales con y sin añejado
en barrica de Bourbon, que dejó sin
palabras a todos los comensales), llegaron cortesía de Tibor una Stone Self Righteous (maravillosa black
IPA, lúpulo americano en todo su esplendor), Toccalmatto Italian Strong Ale (una barleywine rebosante de fruta
confitada y dulzona por el envejecimiento en barricas de Grappa) y Alvinne Undressed
Monbazillac (para la Reina Lúpula, ésta sour ale extraordinaria envejecida
en barrica de Monbazillac, un
vino blanco y dulce, fue la mejor con diferencia de toda la noche).
Con
las papilas extasiadas (en aquel momento podría haber llegado el fin del mundo
y nosotros tan tranquilos…), y disfrutando de una buena tertulia, llegó José
con una Hoppin Frog DORIS The Destroyer
(una Russian I.stout para quitarse el sombrero), abriendo así la caja de los
horrores al invitar al personal. Y ya sabéis, si alguien empieza, los demás no
se quieren quedar atrás… con lo cual se desató otro desfile de birrotes, a cual más
alucinante… En este orden y seguidos con un “a esta invito yo”, llegaron Fantôme Pissenlit (¿quién dijo que una
saison no puede ir detrás de todas las bombas anteriores?), Jester King Noble Hop (otra saison, en
este caso yankie, sugerentemente lupulada al tiempo que equilibrada) y AleSmith IPA (varios coincidimos en que
ésta bomba de lúpulo no estaba precisamente en su mejor momento, haciendo al
pobre Tibor comprobarlo con una segunda botella…). Y hasta aquí puedo leer.
Bueno, por el medio Tibor nos sacó alguna cosa más de comer (embutidos
catalanes para ponerse a llorar de placer, un pica pica a base de salmón que
voló en pocos segundos…) haciendo más llevadero aún el “sufrimiento” vivido/bebido.
Nadie puso pegas al segundo “resopón”… Abajo, el crack de Tibor con algunas de las cervezas que cayeron a lo largo de la noche.
Y
así dimos por finiquitado un sábado que empezó tal que así “Hoy no vamos a
abusar. Lo de anoche fue demasiado…” y terminó con las manillas del reloj
apuntando hacia unos números que hacía siglos que no veía (si sois futboleros, apuntando
entre los dorsales que Xavi e Iniesta llevan en el Barça…). Una velada colosal
en todos los sentidos, repleta de joyas para morirse de placer, con una
compañía aún mejor, que nos dieron un fin de semana que decidí calificar de
intenso para el título del post por no hacerlo con algo más fuerte y que nos encerraran
a todos en un manicomio. En resumen, merece y mucho, muchísimo, la pena ir de birras por
Madrid.
--
Aquí
se ha terminado el post. Seguir leyendo la parte más melodramática es
responsabilidad vuestra, solamente vuestra. Avisados estáis. ¿Aún seguís ahí?
Cómo
ya me conocéis, no podía cerrar sin daros
las gracias a todos y cada uno de
vosotros: a mi querido Jorgecín (enorme el sacrificio que hiciste por
compartir velada con nosotros dándonos innumerables momentos de risa y placer),
a Diego (siempre nos quedará Paris… quiero decir, Munich), a José y su mujer
Eva (corazón gigantesco el vuestro, y una ceja levantada sarcásticamente que nunca
olvidaré), a los Labirratorios
(Álvaro, por la velada del viernes y el trato de amigo; Juan porque por fin te
pudimos conocer en persona… que ya iba siendo hora y vete buscando una excusa
para vernos otra vez; y David por aguantarnos todo el fin de semana, y si
hubiera continuado allí seguirías…), a Tíbor y su Animal por hacernos sentir mejor
que en casa (volveré, lo juro, para comer hasta que no te quede nada en la
nevera), a Aurora y Antonio (la próxima que vengáis a Dénia no os libráis de
nosotros… especialmente tú, Antonio, para una ración de fonética… :P), a Raúl
de Irreale (como te dije, me quedé con ganas de charlar más…) y también, aunque
a penas compartimos un cachito de fin de semana, a la gente de La Tape, Fábrica
Maravillas, La Buena Pinta, Cervezorama, L’Europe, El Pedal y Oldenburg por
hacernos disfrutar, lo cual no es nada sencillo para alguien que iba con
ciertas reticencias hacia Madrid (ya sabéis, por aquello de nacer y vivir en
eso que algunos califican como “la playa de Madrid”, lo cual no es nada fácil
de digerir…). Bueno, y también y para que no se me ponga nadie celoso, también
gracias a vosotros por estar ahí leyendo mis cuentos del abuelo cebolleta (por
qué seguís ahí, ¿no? :P).
Menos mal que el 'grandàs'de Jose ya anticipó en su post gran parte de la velada porque sino me corto las venas, así que no me pilla desprevenido. Aún así reconozco que además de algunos cervezones lo que más envidia me da es la comida de Animal y la combinacion de 4 birras y comida de La Tape... Eso no me lo pierdo yo por la gloria de mi primo Jorlll ge!!!
ResponderEliminarSabía que el tema del buen comer te tocaría la fibra... Y eso que no he colgado todos los platos para no provocar un charco de babas de buena mañana... ;). ¡¡¡Animal y La Tape forever!!!
EliminarBrutal!!! menudo fiestón os habeis pegado, ahora entiendo que hayas necesitado tantos días para escribir el post jejeje. Un saludo!
ResponderEliminarJajaja! La verdad es que el hígado necesitaba mucho tiempo para reposar... Uno no está ya para estos trotes... jejeje! Un saludo!!
EliminarHola Pau, soy Tibor.
ResponderEliminarSólo una cosa, he de aclarar que el tema precios no estoy de acuerdo. Viendo la pizarra de otros sitios de Madrid (no hace falta dar nombres) veo precios bastante más elevedados que en Animal.
Para dar fe de ello aquí dejo una muestra de parte de nuestra pizarra de hoy a modo de ejemplo:
The Kernel Simcoe Citra Chinook :22cl 3€, 42,5cl 5€, 56,2cl 6€.
ZZ Naparbier: 29cl 2€, 42,5cl 4€, 56,2 5€.
Rogue Captain Sig's:22cl 3€, 42,5cl 5€, 56,2cl 6€.
Llevo bajando precios desde navidades ya que entiendo que hay que ajustarse a los tiempos que corren.
Lógicamente en sitios clásicos de la capital hay cervezas más baratas pero nada que ver con lo que pinchamos en Animal.
Simplemente aclarar ya que el sanbenito de que Animal es más caro que otros de su especie es falso, y ahí están nuestros precios para demostrarlo.
Salut i birra!
Buenas Tibor, gracias por tu aclaración. Pero revisando las fotos con los precios de todos los locales en los que estuvimos ese fin de semana no me invento nada. Si después los has bajado me alegro por la gente pero ese sábado en tu local tenías al tamaño de 56,2cl: dos cervezas (Napar ZZ y Pils) a 5€, otras dos a 6€ (Yria Brown y Dougalls Invierno), tres a 7,5€ (dos Mikkeller y una The Kernel) y una Struise Rose a 8€. Cada cual sabrá el bolsillo que tiene pero en mi opinión es caro y no me escondo. De todas formas simplemente es una opinión de un consumidor y creo que a pesar de ello la opinión sobre Animal no ha sido precisamente negativa. Salut i birra!
EliminarPau!
ResponderEliminarOtro detalle que se me olvidaba, y estos precios con el aperitivo gratis que se pone con cada cerveza (siempre patatas y aceitunas + embutido, queso,paté,sardinas con chimichurri,alitas barbacoa...) en ningún otro local de cervezas de Madrid te ponen un aperitivo cómo en Animal.
Que conste en acta!
Tibor
Esta discusión se vivió hace un par de meses en FB. Un cliente dijo que había podido ir por fin al Animal, y que bebió buenas cervezas, pero que los precios eran caros (17,6 por dos copas de barril), y que el no podía permitírselo. Todo de buenas, y diciendo que, si eso era sostenible, enhorabuena, y que deseaba suerte al negocio.
ResponderEliminarLa reacción mayoritaria fue acusarle de analfabeto cervecero y decirle que se fuese a beber mahous al supermercado. A mí me sentó mal ese trato, porque no quiero llegar a un mundo en el que 8€ por una pinta sea algo que no haya de parecer caro. Puedes pagarlo, y puede valerlo, pero desde luego, no es barato. Y lo que es más, hay que respetar (y agradecer) el derecho a decirlo.
En cambio, a Pau, nadie puede acusarle de analfabeto cervecero. Y si él, que en dos días recorre 10 bares, dice que "los precios eran un poco más elevados que en otros locales", pues es probable que sea cierto. (¿Pau, no te pasó lo mismo con El Pedal?).
Por otra parte es cierto, como bien dice en el post, que las cervezas son deliciosas, las tapas riquísimas, y Tibor un gran anfitrión. Pero los precios son frías matemáticas. Y hay que tomarse las críticas con afán de mejora, no de destruir ni hacer daño (como decía alguno en la entrada de FB antes mencionada). Pero vamos, que esta es mi opinión como habitual consumidor de los bares de Madrid. Si hay más gente que opina diferente, los precios seguirán subiendo.
Ya hemos hablado algunas veces por diferentes sitios del tema precios. No se trata de calificar a nadie de experto ni de analfabeto ya que con el dinero en mano todos merecen un respeto como consumidor y la opinión de todos es igualmente válida siempre que sea desde el respeto, las buenas formas y con ánimo constructivista (que humildemente es lo que quería hacer con el post).
EliminarSobre Animal simplemente he dado mi impresión, sin ensañarme, de los precios, pero cómo bien dices también recalco lo buen anfitrión que es Tibor y su excelente carta de comida y cerveza. No hay que vender nada, cada cual lo puede comprobar por si mismo y tampoco hay que olvidar que la opinión vertida en este blog es una más de un simple consumidor que cómo bien dices, se gastó sus billetes en tantos bares cómo pudimos visitar.
Y sí, dije lo mismo del Pedal en el anterior post, con precios más descompensados aún en las botellas que pedimos.
Gracias por dar tu opinión, Baron.
JAJAJAJA, SI ANTES TE DIGO QUE METAS UN POCO DE CAÑA, JAJAJAJAJA. YA SE PORQUÉ NO LA METES, LUEGO TE SALTAN A LA YUGULAAAARRR, JAJAJAJAJA. SIN ENTRAR EN COMPARACIONES DE PRECIOS EN LOCALES, TENGO QUE DECIR, CON TODO EL PESAR DE MI CORAZÓN, QUE LA MAYORÍA SE ESTÁ SUBIENDO A LA PARRA. VIENDO LOS PRECIOS DE IRREALE Y DEL PEDAL DEL VIERNES, NO QUIERO NI SABER LO QUE OS VALDRÍA LO DEL SÁBADO, VIENDO TANTOS JOYONES. DOY FE DEL BUEN HACER DE TIBOR Y SU EQUIPO, DE LA CALIDAD DE SUS PRODUCTOS Y DE LO DIFICIL QUE ES CONSEGUIR TAN TREMENDOS BIRROTES, PERO ESO NO HAY BOLSILLO QUE LO RESISTA, NI EN ANIMAL NI EN NINGÚN LADO. CON LA COMIDA IGUAL, EL OTRO DIA EN IRREALE SALÍ CON HAMBRE, NO RECUERDO LOS PRECIOS, PERO LAS MINIHAMBURGUESAS ME ENTRARON EN UN EMPASTE, UNA PERSONA COMO YO NO COME CON ESO, NI CON LA CARRILLADA DE ANIMAL, QUE ESTÁ DIVINA DE LA MUERTE, DOY FE, PERO ES UN SABLAZO, YO NO ME LO PUEDO PERMITIR. EN EL PEDAL, LA CLOWN SHOES LUBRICATION VALIA 18 EURAZOS, ANTE MI ASOMBRO ME DICEN QUE VALE POCO MAS QUE EN TIENDA ( ACABO DE VERLA EN UNA TIENDA ONLINE A MENOS DE 11€ QUE TAMPOCO LA VEO BARATA ) Y EN IRREALE LA SPEEDWAY STOUT QUE ME QUERÍA JINCAR A PACHAS CON TEDDY A 24€!!!!! ( QUE LA ACABO DE VER EN OTRA TIENDA ONLINE AL MODICO PRECIO DE CASI 16 EURACOS, TOTAL NÁ, ALLÍ SE QUEDÓ ).AUNQUE LO QUE MAS ME DOLIÓ A MI FUÉ EL SABLAZO DEL TAXI, JOJOJOJO, A TOMAR POR SACO EL PRESUPUESTO!! XD
EliminarEN SERIO, HACE UNOS AÑOS LE SACAS A UN CERVECERO UN SNIFTER DE 22 CL Y ANTES DE SABER EL PRECIO TE MANDA A LA MIERDA, SI LE DICES EL PRECIO ACABAS EN EL HOSPITAL, JAJAJA. NO ES QUE QUERAMOS OLFATEAR UN PETROLEO EN PEQUEÑA CANTIDAD, ES QUE A ESOS PRECIOS NO PUEDES HACER OTRA COSA.
EL QUE PUEDA QUE LO PILLE, SI ESTÁ ASÍ ES QUE SE VENDE, ESTÁ CLARO, ESTE MUNDILLO SE ESTÁ SUBIENDO DE PRECIO DEMASIADO, TANTO TIENDAS COMO LOCALES, VAMOS A TENER QUE VOLVER A LAS BIRRAS DE IMPORTACIÓN DE SIEMPRE ( PORQUE LA MITAD DE ARTESANALES TAMPOCO ESTÁN BARATAS VAMOS ) Y DEJAR DE SER TAN ELITISTAS, EMPEZARÉ A VER PRECIOS DE CHIMAYS Y LEFFES OTRA VEZ, JOJOJO. MENOS MAL QUE MI FRANZISKANER EN LATA NO ME ABANDONA, JAJAJJA. SALUDOS Y NO OS PIQUEIS ;P
Ya empiezas a entender por qué uno es un tanto precavido con ciertos comentarios... jejeje! Pues no puedo más que decir que comparto completamente la sensación que comentas. No se trata de si una cosa vale lo que se pide o no, ya que ahí entramos en un bucle que no tiene fácil salida y al final todo se soluciona en un lo pago o no. El problema cómo decía hace tiempo con el "famoso post" de la burbuja cervecera, es que las teóricas excepciones se terminan convirtiendo en la norma y a nadie extraña ya ver botellas de 66cl que en tienda cuestan 8€ por encima de 15€ en un bar, pero tampoco cervezas de 33cl a 6€ cuando en tienda no cuestan más de 2 o 3€.
EliminarSi en esta escapada pudimos hacer lo que hicimos (y sobretodo el festival de Animal) fue básicamente porque compartimos cervezas con mucha gente, además de por los detalles que tuvieron algunos locales con nosotros. De no ser así uno ya no podría salir de casa sin empeñarse. En fin, que tampoco quería hablar de todo esto en este post pero ya que ha salido el tema me alegro que algunos hayáis decidido dar vuestra impresión. Muchas gracias, Jorge.
P.D. Y de piques nada, jejeje!! Ya hay demasiadas cosas serias en la vida cómo para picarse por birra... ;)
DE ESO NADA, SACA LA NAVAJA, JAJAJAJAJA.
EliminarMenos mal que tenía "toque de queda" en casa, porque si no, viendo el material que os metisteis entre pecho y espalda, me pierdo seguro... Me ha llamado poderosamente la atención la Alvinne Undressed Monbazillac. Una pena por cierto lo de la Alesmith, porque probar esa maravilla en su punto, no tiene parangón. Me alegro de que disfrutarais como enanos el fin de semana. Has visto? si es que los madrileños al final somos gente maja, jejeje..., acogedores y hospitalarios con el de fuera. Pero los madrileños de verdad, no los macarras baratillos ;) que también los hay. Reitero una vez más que fue un placer conoceros y compartir mesa, conversación y birra con vosotros. Habrá que repetirlo por supuesto. Un abrazo.
ResponderEliminarPues no sabría decirte si hiciste bien o mal... por gusto y placer mal, pero por salud casi que fuiste el más espabilado... ;)
EliminarLa Alvinne fue alucinante, un detallazo de Tibor que convenció el mismísimo Teddy (un tanto reacio a las cervezas espontáneas, jejeje). La AleSmith, pues una pena sí, me hubiera gustado poder probarla en condiciones.
Y sí, ya he comprobado que la Cibeles no provoca sarpullidos, jejeje... y no lo tenía del todo claro... ;). Un tremendo placer compartir velada con vosotros y contigo en particular. Habrá que repetirlo, no dudes que haré lo posible para que así sea. Un fuerte abrazo!
Joder, pues hoy he probado la Alvinne Undressed Monbazillac en sus condiciones óptimas de conservación en el Pedal. Es una cerveza que no caló entre mis compañeros e incluso a mí me ha resultado muy difícil de entrar. Una cerveza que jamás tendrá éxito en ventas, desde luego. A ver si hay otras Alvinnes mejores.
EliminarPerdón, el Animal. A estas alturas, después de cuatro cervezas trasegadas, ya me cuesta distinguir nombres, ¡je, je!
EliminarHe estado practicando la fonética eh, no te vayas a pensar!
ResponderEliminarUna pena no haberte visto el sábado también, ni te imaginas las aventuras que tuvimos. Acabamos también en La Tape, pero más tarde, con los colegas. Aurora evidentemente estaba al otro lado. La noche del viernes hizo mella y llegué tarde a todas partes y con un mareo bastante fino, pero bueno, todo sea por amor al arte.
La próxima vez a ver si coincides con Aurora en horario de La Tape!
Un abrazo y nos veremos
Jejeje!!! Veo que la fonética hizo mella... ;). A ver si para la próxima vemos esos avances, eh?
EliminarUna delicia La Tape, ambientazo, birrotes, comida... Búscate una fecha para la próxima que nos veamos en ese local... y Aurora, delante o detrás de la barra! Dale un abrazo de nuestra parte si es que no nos lee directamente :P. Disfrutamos mucho de vuestra compañía! Un abrazo!!!
Leido lo dos post sólo me queda por decir: "Lúpulos: gracias de todo corazón por hacernos partícipes de tan fantástico fin de semana; como hacía mucho tiempo que no disfrutábamos", y así fue, nos desmelenamos..., bueno yo menos.
ResponderEliminarUn placer haberos conocido y con ganas que se vuelva a repetir.
Un abrazo.
Gracias por tus palabras. Lo pasamos estupendamente, grandes noches ambas, más que por birras por excelente compañía. Un placer enorme conoceros en persona a tí y a tu mujer. Ya estoy esperando el reencuentro... eso sí, espero que la próxima sea más calmada... ;).
EliminarUn abrazo!
Hola a todos desde zumodecebada. Lo primero, brutal resumen del panorama cervecero en Madrid Pau, que no todos en Madrid somos centralistas jejeje. Veo cierta polémica con los precios y no tengo mas que decir, como consumidor, que comparto la oponión de Pau. Si recorres Europa ves que en paises mucho mas caros se manejan precios bastante mas proporcionales a los bolsillos, pero que coño, cada uno con su negocio hace lo que quiere. Yo como consumidor me compro las birras en tienda las tomo en casa o voy a bares donde quizás no tenga tanta exclusividad pero por una pinta sea cual sea me cobran 4 ó 5 €.
ResponderEliminarDe igual modo Pau, si vuelves a Madrid reservanos 10 mins jejeje que ya sabemos que la agenda la tendrás llena pero hay ganitas de una birra compartida.
Un saludo y mucho lúpuloadicto
Buenas compañeros!! Me alegro que os hayan gustado los posts y que deis vuestra opinión sobre los precios.
EliminarEstá claro que cada cual marca el precio que le viene en gana y cada cual será libre o no de ir y pagarlo, pero como consumidor la sensación que me dio es de caro y por eso lo dije. Sin necesidad de hacer comparaciones con el extranjero, en la misma Barcelona he estado en unos cuantos bares y no tuve la misma sensación que en Madrid por ejemplo. Quizás el hecho de que en Madrid haya crecido todo tan rápido y que no haya un recorrido cómo en otras partes haya llevado a esta situación, pero estoy seguro que el tiempo pondrá a todos en su lugar ya que al final el que paga manda siempre.
Cuando quieras compartimos una, por Madrid, o si vienes por Valencia pues también. :)
Un saludo!